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La vida de miles de niños en Etiopía peligra si no llegan ayudas
La vida de miles de niños en Etiopía peligra si no llegan ayudas
Etiopía vuelve a convertirse en el epicentro de una crisis humanitaria a gran escala debido al conflicto militar que se desató a finales del 2020 en Tigray, la región mas norteña del país africano. Lo que ha ocasionado que miles de personas huyan hacia puntos fronterizos aislados, a horas de los pueblos mas cercanos. Buena parte de estas personas son mujeres, así como niños y niñas. Además. Muchas salieron con muy pocas pertenencias y llegaron exhaustas después de haber caminado largas distancia en un entorno hostil.
Esta huída de los territorios en conflicto hacia zonas inaccesibles de Tigray está ocasionando que “al menos 33 mil niños y niñas se encuentren gravemente desnutridos y se enfrentan a una muerte inminente si no reciben una ayuda inmediata”, denuncia James Elder, portavoz de UNICEF.
Entre los desplazados internos se encuentran cientos de madres con sus hijos. Es el caso de Weyni, quien dio a luz en su horrendo viaje para llegar a Adigrat, cerca de la frontera con Eritrea, desde Welkait, en Tigray Occidental. "Hui a la ciudad mas cercana por temor a la guerra, sabiendo que podía ponerme de parto en cualquier momento", dice Weyni. De momento ella se queda y duerme en el piso de un salón de clases con muchas otras mujeres.
Para empeorar las cosas, explica James Elder, “la crisis de desnutrición en la región ha coincidido con grandes daños a los sistemas y servicios esenciales de los que dependen los niños y niñas para su supervivencia. Los equipos móviles de salud y nutrición han sido atacados y acosados. Las instalaciones sanitarias han sido saqueadas o dañadas y la capacidad de vacunación básica se ha detenido. La destrucción de la infraestructura de agua ha provocado una escasez extrema de agua potable”.
Para la directora ejecutiva de UNICEF, Henrieta Fore, es imperativo que las partes en conflicto garanticen que los actores humanitarios tengan un acceso seguro y sin obstáculo al terreno para evitar una hambruna generalizada y llegar hasta los más necesitados. “Esta es una catástrofe provocada por los hombres. Y aunque parezca increíble, las cosas se pueden deteriorar aún más para los niños y niñas, ya que se espera que la inseguridad alimentaria empeore durante los próximos meses”.