En su última instalación, 'Un hombre que se come su propia cola', el artista polaco Przemek Branas hace referencia a la figura mítica transcultural del Ouroboros. Asociada a los cultos solares, la serpiente se convirtió en un símbolo del infinito, el eterno retorno y la naturaleza cíclica del tiempo. Esta criatura mítica en constante devoración y regeneración representaba la eternidad de la materia y el concepto de reconciliación de los opuestos aparentes. Sin embargo, a veces también se interpretaba como un símbolo de la estupidez, el dar vueltas en círculos o el comportamiento irracional.

Este pensamiento no lineal y mágico sobre el tiempo fue la base de muchas epistemologías indígenas y pre-lustradas. Hoy, la figura del Ouroboros reaparece en la filosofía de Timothy Morton, quien aboga por reemplazar el pensamiento lineal y racional por la complejidad, los bucles y las ambigüedades. La extrañeza se convierte en el principio del presente. La forma híbrida del hombre-serpiente es un modelo para todos los seres que están trágicamente entrelazados con otras existencias no humanas y procesos de diversas escalas. No hay escapatoria del bucle, no hay emancipación ni control sobre él. Es hora, entonces, de aprender a bailar en círculos.

Branas trabaja estrechamente con el material circundante, experimentando con sus propias técnicas y utilizando materiales naturales y objetos encontrados en el jardín botánico, en huertos familiares, durante paseos por la playa o en mercados de verduras del barrio de El Raval (Barcelona). Crea cometas a partir de folletos de supermercados, máscaras antiguas a partir de cáscaras de frutas y figuras arquetípicas a partir de plantas y palos encontrados. Sus obras surgen como resultado de experimentos y performances en los que el artista incorpora procesos naturales, como el paso del tiempo, la energía solar, la vegetación o la descomposición. Branas asume los roles de botánico, etnógrafo e inventor, y a veces de embaucador cósmico. Utilizando múltiples códigos culturales, crea una narrativa visual sobre el potencial de transformación y la dulzura del estancamiento, que puede interpretarse a nivel personal, eco-crítico o político.

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La exposición 'Un hombre que se come su propia cola', del artista polaco Przemek Branas y comisariada por la historiadora del arte, investigadora y escritora Michalina Sablik, se podrá visitar desde el 26 de septiembre hasta el 2 de noviembre en el espacio multifuncional Cascadas de Barcelona.

Exposición 'Un hombre que se come su propia cola'

Ubicación
CasCaDas ArtSpace Barcelona
Barcelona, España

Fecha
Desde el 26 de septiembre hasta el 2 de noviembre de 2024

Contacto
CasCaDas ArtSpace